7.9.07

SE TE ESTÁ VIENDO LA OTRA


Se te está viendo la otra.

Se parece a ti:
los pasos, el mismo ceño,
los mismos tacones altos
todos manchados de estrellas.
Cuando vayáis por la calle
juntas, las dos,
¡qué difícil el saber
quién eres, quién no eres tú!
Tan iguales ya, que sea
imposible vivir más
así, siendo tan iguales.
Y como tú eres la frágil,
la apenas siendo, tiernísima,
tú tienes que ser la muerta.
Tú dejarás que te mate,
que siga viviendo ella,
embustera, falsa tú,
pero tan igual a ti
que nadie se acordará
sino yo de los que eras.
Y vendrá un día
-porque vendrá, sí, vendrá-
en que al mirarme a los ojos
tú veas
que pienso en ella y la quiero:
tú veas que no eres tú.

22.8.07

Una clase de amor



Una clase de amor



Saciando tu hambre te fuiste conmigo

como árbol marchito en que brota la flor

en silencio comimos y en silencio bebimos

pero algo paso que se nos fue el amor.

Camino a los postres pensamos lo mismo

¡Qué suerte tenerte! ¡Qué suerte señor!

pedimos dos copas y brindamos con vino

aunque algo pasara y se nos fuera el amor.

Después de las copas bailamos, reímos,

y justo después quise hacer el amor,

viniste a mi casa, aunque… en ella vivimos,

y deshicimos la cama aunque no hubiera amor.

Y aquí en la penumbra, en silencio y distinto

mirando a la luna sin temor ni rencor,

le confieso en voz alta y acaso al destino

que si esto que siento, no será el amor que volvió.

Mariajo 28/02/2006

19.8.07

¿Coseras esa red?


Vieja amiga, solitaria y casi valiente,

enciendes nostalgias solamente en mí.

Y te envalentonas y apenas entiendes

que hoy por ti y mañana será por mí.



Enciendes las luces de tu falsa guarida.

miro hacia dentro con mucho pudor

rebusco en tu orden y de paso en tu herida

y solo encuentro en tu casa amargura y dolor.



Se que intentas esconderte de todos,

detrás de un amor al que le tejes la red

y se rompe, y la coses, y el te mete los codos

y tu vuelves a apelar a lo noble que es.



Y tenemos la suerte de saberte en tu herida.

con las lagrimas crudas del amor que se fue,

pero tu coses y coses, y te dejas en ello la vida

aunque sepas que siempre tendras que coser esa red.

Mariajo

17.8.07

Voy a.....


Aquí vuelvo, con la sensación añeja que dejabas antes en mí elevada a la máxima potencia. Creyéndote dueña de mi sentir y de mi persona. Vuelvo a sentir que pierdo la voluntad y a veces hasta el norte, que vivo por y para ti. Que aunque te veo de lejos te dejo llegar, y te dejo entrar, y seguir, y seguir y seguir…
Ahora me debes mil tardes de vida y sentimientos enfrentados, ahora tengo la voluntad alrededor de tu cuello esperando hacerte el nudo mortal y estrangular tus pretensiones.
¿Cómo lo hiciste? ¿Cómo volviste sin que te vieras?¿Cómo te instalaste en mi casa y en mi cuerpo?¿Cómo fuiste capaz de volver con lo que yo te odiaba?
Pero estas aquí, endemoniadamente posesiva y posesivamente endemoniada. Y me miras desde el otro lado, y te callas… y maldito ese silencio que me mira desde lejos y maldita tu mirada. Y malditos que sean mis juicios sin remedio ni siquiera voluntad para sanarlos.
Has vuelto, pero te se y te reconozco. Te veo ahí sentada viendo pasar el tiempo por detrás de esa almohada que me pegas a la espalda y me siento sobre ti y te lo permito. Sumisa.
Me gustaría volver a echarte de mi vida. Pero se que hice algo mal. Tal vez no debi sacarte de ella. Tal vez sentiste un abandono fuera de lugar. Tal vez la solución sea hacer las paces y empezar a convivir contigo misma… conmigo misma.
Ahora siento un abandono especial de mi para ti. Y siento un vacio inexplicable del que voy a salir porque se que aun no es tarde.
Y voy a mirarte en el espejo y voy a regalarte la mejor de las sonrisas… igual te regalo un te quiero. Porque hace un año que te conozco, un poco mas si acaso. Y revivo historias que no son lejanas e igual me ayuda ese viaje a Oriente donde te vi por primera vez.
Voy a viajar para mirarte, para encontrar el perdón que necesito. Voy a visitarte en tu casa en tu guarida, en tu reino… en mi paraíso. Y entrare despacio y a hurtadillas, para mirarte sin ser vista. Y notare como tocas el agua y beberé de ese rio que pisas, y me sentare a la sombra de ese árbol y descansare en tu casa porque ahora ya no me parece maldita.
Y parece mentira que a lo largo de las letras que escribo, a lo ancho del papel que las calcan, estos breves minutos me hayan hecho sentir… Que hoy y mañana y siempre podré convivir contigo.

Mariajo

28.2.07

Querida Soledad:


En la soledad intento a veces pararme a pensar en mis deseos, mis inquietudes y mis anhelos. Es entonces cuando mi soledad viene a mi como por arte de magia. Ella que desde siempre fue mi compañera y que se ahoga relegada a un viejo rincón de mis recuerdos. Ella siempre protagonista de mis sueños, de mi vida y de mis desvelos, ahora se siente ninguneada, devastada por la presencia de unorazón lleno. Ella quiere volver a mi. Solo tengo que saber cuando darle cabida en mi vida para no provocar una venganza sin contrario ni rival.
“Querida soledad:
Soy consciente de haberte abandonado, se que me desprendí de ti justo cuando mejor nos llevábamos. Compañera inseparable, terriblemente protagonista de mi y de ti. Vuelvo a ti hoy, para sumergirme en mis pensamientos y para preguntarte en qué lugar te perdí o donde te quise guardar.
Ahora a veces te busco, pero no siempre te encuentro, a veces te veo lejana, tan lejana que no te alcanzo, y es que…. A veces me apeteces, a veces llenabas en mi mucho mas de lo que cualquiera lo haría. Te volviste necesaria. Y me da miedo recapacitar y darme cuenta que si sigo hacia delante es posible que nunca mas te vuelva a ver. Es como querer que te mueras y ni siquiera prepararte un funeral.
¿Y si realmente quiero eso, por qué no he empezado ya? ¿Por qué ese paso que me faltasiento que es un paso hacia el vacío? Te quise, te quise mucho mi querida soledad, a veces te echo de menos y me refugio en mis letras, es ahí donde te encuentro, donde te recuerdo, donde me dejas atisbos de melancolía de aquello que fue muy mi pesar y también a pesar de mí.
Me gustaría encaramarme a lomos de tu blanca y solitaria escoba y volar hacia aquel cuarto de nostalgias en el que nos sumíamos cuando éramos amigas. Pero ahora no puedo. No puedo hacerlo físicamente y vuelo a ti con el alma a veces. Y Enrique lo nota y me pregunta el por qué. Pero yo no te quiero compartir, ese momento querida amiga, el momento donde tu y yo nos encontramos en sueños, es solo nuestro. Estábamos bien, ahora yo estoy bien y tu agonizas en silencio dejándome ser….
Por eso yo tengo que agradecerte que me dejaras conocerte y ser tu amiga. Porque ser así… lo aprendí de ti.”
Así que como nuestra meta era preguntarnos los por qués . Yo he encontrado un por que muy mio, y es que mis queridos compañeros, me he dado cuenta que cuando sea madre, perderé el silencio de mi casa, la tranquilidad en la que me refugio, pensare en mas gente a parte de mi. Compartiré mis horas, y hasta mis besos. Mis abrazos serán en grupo, mi cama estará s llena los domingos por las mañanas, mi ordenador compartido, el mando de la tele ya ni me importara, y en el armario los duendes inundaran el zapatero de piececitos pequeños. Asi que aunque cuando empece a escribir esto, no tenia ni idea de lo que iba a decir… termino diciendo que se me ha llenado el corazón diciendo todo esto…..
Mariajo

17.2.07

No fue fácil


Aquí vuelvo a sentarme con la sensación que causa en mi vacío, el vacío de a veces no saber bien el por que o el cómo llegue a aquella conclusión.
Te he imaginado mamá, te imaginado limpia, pura. Te quise imaginar la madre perfecta, la soñada, y aunque enferma y con alguna carencia, te imaginé. Y además lo hice así. Te imaginé como quise, como supe para defenderme de aquella sensación de falta de cariño que percibí en algún momento. Por aquel entonces, me amoldaba a la vida de cualquiera que me hiciera sentir como en casa, intentando entonces permanecer todo el tiempo posible fuera de la mía, todo el tiempo que me dejaban las tareas de la casa y recados varios. Dicho así podría parecer que estaba todo el día liada, y no es cierto. Yo lo hacía todo rápido, a regañadientes, y tu detrás de mi todo el día insistiendome en que tenía que hacer aquello o lo otro, y mientras yo sacaba todos los huecos humanamente posible para vivir en la vida de otros….
Primero fue mi amiga Marta, ¡qué referente para mi! Porque ella era para su madre, lo que yo no era para ti. Una muchacha trabajadora, que después de volver del colegio cocinaba para la familia, y para que su madre a la vuelta del trabajo no tuviera que ponerse a guisar. Yo solo la miraba y si podía, pues me hacia un hueco a la hora de la cena con ellos en su casa.
Luego fue con Guadalupe, ella ya era mayor, una mujer triste, solitaria, depresiva, alguna que otra vez me dio un susto con algun intento de suicidio. Pero lograba mi meta, no estar en casa y vivir en la piel de los demas.
Hubo gente de la que aprendi cosas, solo las que me interesaron, dirias tu entre cansada y dolorida.
La cosa esta en que hace poco te imagine, te recordé como te veo de verdad, y mis ojos se nublaron en humedades porque esa imagen que tengo surcada en el alma de una madre modelo, de la amiga perfecta….no existe. Solo me la he querido inventar para tener algo a lo que agarrarme continuamente y con fuerza ¿Y sabes? En realidad yo prefiero saber la verdad aunque me duela. Saber como se ahora que puedo contar contigo, pero no de una forma efimera, no de la forma que imagine hasta ahora. Se que puedo contar contigo, se que te tengo ahí, en la distancia, donde siempre te he querido mantener. Tal vez ya veia demasiado sufrimiento en ti como para encima hacerte partícipe de mis problemas de adolescente, tal vez siempre he visto la sombra de una vida no deseada en ti, una tristeza en el fondo de una vida que se te escapo de entre las manos . Tal vez no cambiarias lo que viviste por el resultado de tus hijos, pero la amargura de las circunstancias se te grabaron en el alma. Y esas cosas se notan.
Ahora que reflexiono sobre tu recuerdo, me doy cuenta de cómo fuiste y como fui yo. Y llego a la conclusión de que fuimos como pudimos. O como mejor… supimos ser. Y que no tiene por que ser bueno ni malo, simplemente fue.
Lo que importa ahora es como seremos, como mantendremos este amor tan grande que tenemos la una por la otra, amor que reconozco tanto en ti como en mi.
Yo que se no fui facil, yo se que tu tampoco lo fuiste. Y por eso… ya no mas. No quiero mas recuerdos falsos, no quiero mas composiciones del lugar salidas de mi ego. Quiero verdades como puños, quiero sentimientos autenticos, quiero mirarte a los ojos y solo ver el verde que reflejas.
Simplemente te quiero. No hace falta mas.
Mariajo

10.1.07

A ti..... y a mi.



Llevo intentado escribirte desde hace un par de semanas, pero me resulta difícil hablarte con el corazón en la mano, porque se que a ti no te puedo engañar, que cualquier atisbo de justificación la vas a detectar como por

arte de magia.

Hace tiempo que quiero mirarte en un espejo sin tener que apartar la mirada. Quiero mirarte a los ojos y ver detrás de ese pardo que los días de sol me enseñas. Quiero mirarte esta vez con lupa y ver más allá, donde no haya visto nadie.

Es tan difícil escribirte sin temer tu ojo de juez y de jurado y verte sin desconfiar que a veces paso por ese espejo donde te pretendo sin mirar de reojo siquiera.

Has cambiado, y a la vez yo voy cambiando contigo, ahora sueles pensar más. Antes le dabas muchas vueltas a las cosas pero no sacabas conclusiones. Ahora esas conclusiones a veces aparecen como por arte de magia y sin esperarlas. Me gustaría decir que los años te van cambiando, que ya no eres la niña que siempre has pretendido ser. Pero te siento estancada en una edad en la que pensaste que todo te iba tan bien, que ni los lujos de detalles podrían sacarte de ella. ¡Qué divertido! ¡Qué bien lo pasabas! Y recurro a esta carta para decirte amiga mía, que si tan bueno era, si tan estupendo fue todo como para querer quedarte en aquel país de nunca jamás…..¿por qué aquellas noches en duermevela? ¿Por qué de aquella insatisfacción? ¿Por qué de tu llanto amargo? ¿Por qué aquellas cruzadas buscado…..? ¿Qué buscabas? Ya se que siempre nos queda en el recuerdo todo aquello que nos hizo sonreír, que nos emociono aquel día cualquiera de cualquier mes, aquello que aún nos titila en la sonrisa cuando lo recordamos….. Pero tengo que ser hoy tu Pepito Grillo, tengo que ser yo tu juez a veces y a veces tu verdugo, la que te diga que te sentías insatisfecha, vacía y sola.

Así que me gustaría proponerte una partida de deseos íntimos si tú me lo aceptas. Vamos a crecer. Vamos a salir de los veinticinco años, y llegaremos de la mano a los treinta y dos, justo la edad que tenemos, vamos a vivir en el presente, sin agarrarnos tanto al pasado y a lo que nos gustó de él porque….. si te das cuenta, y miras con el mismo prisma que miro yo. Lo que tienes ahora es mejor. Tienes una persona que te ama, te respeta y comparte una vida contigo, que te abraza todas las noches como si en ello se le fuera la vida. Tienes una familia que aunque no es la familia que quisiste imaginar en aquellos sueños de quinceañera, también te quiere como tu les quieres a ellos. Tienes una madre mas especial que las otras, porque como aquel día aquello que escribiste reflejo perfectamente lo que ella refleja:

“Aquellos que no tengáis artritis, acuclillaos ante la belleza del mundo.”

¡Y que cierto! Que belleza irradia ella. Y un padre, al que te ha costado aceptar tal como es, con el que no has compartido grandes cosas, quizá porque el no quiso, o tal vez porque tu no le dejaste con aquella rebeldía de tu difícil adolescencia.

Hace poco que has hecho como un punto y aparte en tu vida, y dentro de nada ya harán los primeros seis meses de esta andadura. El balance es mas que positivo y aunque ha habido veces en las que te has derrumbado yo he estado ahí para no dejar que te cayeras.

Antes nuestra relación era como aquello que escribió Benedetti que decía algo asi:

“Vos lo dijiste, nuestro amor fue desde siempre un niño muerto, solo de a ratos parecía que iba a vivir que iba a vencernos”

Ahora ya voy entendiendo que eres parte de mi y yo soy parte de ti, que debemos complementarnos, que cuando me mire y te mire en el espejo debo ver las dos partes de mis ojos, la de dentro y la de fuera. Que últimamente has tenido más inquietudes, pero que algunas ya no están. Solo te queda, solo me queda compartir con el resto este amor que llevo dentro y que tal vez ni siquiera yo sabia reconocerlo como tan grande. Así que no te presiones porque cuando llegue el día de pedir perdón, te saldrá tan del alma, que la situación forzada que te llevas imaginando todos estos días, la veras pasar por delante de ti, con toda la naturalidad del mundo. Entonces…. Sonreirás.

Mariajo