21.11.06

Impotencia



Impotencia maldita no me mires la cara,

Si con esa mirada me devuelves lo oscuro,

Impotencia maldita nunca te debí nada

No me jodas ahora, con tu eterna mirada

Si en mis ojos de furia me ves sin aliento,

Cabrona del alma, ¡baja los ojos de mi¡

Las palabras que hoy digo se las llevara el viento,

Pero el sentimiento se quedara aquí.

Decepción, impotencia, orgullo marchito,

Soberbia con rabia, la crueldad en mí,

Hoy me miro furiosa a tu espejo, en el vimos lo mismo,

Y me pienso una ingenua por creer en ti.

Juicios inválidos desdeñas a voces,

Voces sedientas tal vez de mí,

Pero hoy con tus gritos me has pegado dos coces,

Y el orgullo furioso… también se quedará aquí.

Hoy sedienta me revuelvo furiosa de rabia,

Impotencia en mis manos escriben así,

Yo sé que mañana te hará daño mi furia,

Pero hoy, te lo juro…. Que lo siento yo así.

1.11.06

Tu paz



Y en silencio medito y me lanzo al vacío,

de unas frases voladas que me lanzan instinto,

sentimientos velados de un amor que ahora es mío,

de unos besos que hablan pues los dos lo quisimos.

Hoy propones triunfante al azar mi destino,

y te siento contento, ilusionado, distinto…

y en tus ojos el brillo esta noche es divino,

cuando al mirar mi sonrisa te sientes magnífico.

Hoy la luna sonríe conmigo, como siempre lo hizo,

esta noche la luna se sonroja de algo que ha visto

esta noche mi luna me arrebata y me acuna,

por temblar en tus manos, por sentirte tan mío.

Hay amor en tus ojos eso no puedes negarlo,

en mis manos radiantes la grandeza se hace gigante,

y en tu cuerpo nervioso se desliza al momento,

el silencio y la angustia, de lo que estamos viviendo.

Hoy pregunto al espejo en el que vimos lo mismo

y como un cuento de hadas el espejo hablará

me susurra palabras que me dice al oído,

usará tus palabras, tu ternura y tu paz.

Hoy descubro caricias a voces,

en las que me reflejo pidiéndote más,

un amor que te pido sin que apenas lo notes,

porque sin tu darte cuenta ya me lo das.

Y me acuesto en mi cama que conserva tu aroma,

y tu olor se me cala como en sueños de azahar

y resulta brillante que el sueño se mezcla,

entre sueños, verdades, ¿quién los distinguirá?

Mañana tu mano se juntará con la mía,

unidas por siempre… unidas ya están,

solo quise que tú como bien lo pedías

sintieras la paz, que yo te he querido dar…

Mariajo (24/11/2003)